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El sector del transporte es la fuente de emisiones que más rápido crece en el mundo: Hoy en día, genera alrededor del 28% de las emisiones totales, con un 59% procedente de los vehículos de pasajeros y camiones ligeros. Mientras que muchos otros sectores ya reducen sus emisiones año tras año, el transporte va en dirección contraria, amenazando con socavar los objetivos del Acuerdo de París. El Informe de Movilidad Sostenible 2021 de Kapsch TrafficCom ilustra los retos actuales del transporte y muestra cómo afrontarlos. Aunque los kilómetros recorridos por los vehículos (VMT – del inglés, Vehicle Miles Traveled) disminuyeron drásticamente durante los primeros días de la pandemia de COVID-19, en los periodos que se bajan las restricciones estos se repuntan hasta los niveles anteriores a la pandemia. Además, muchas personas están menos dispuestas a utilizar el transporte público debido al riesgo de infección, lo que supone una demanda aún mayor en las redes viales y un aumento del VMT. Dado que la dependencia de los vehículos privados sigue creciendo en todo el mundo, ninguna ciudad o autoridad vial puede ser complaciente con el creciente desafío de las emisiones. El vehículo medio de gasolina emite 8887g de CO2 por cada galón de gasolina y un total de 4,6 toneladas métricas de CO2 cada año. Urgen soluciones de movilidad a corto plazo. “Se necesitan urgentemente soluciones a corto plazo para frenar las emisiones de millones de vehículos en las redes viales del mundo”, afirma Alfredo Escriba, CTO de Kapsch TrafficCom. “El tráfico urbano y la gestión de la congestión tienen un impacto inmediato que ayuda a reducir las emisiones de CO2. Según un estudio reciente realizado en Canadá, se ha demostrado que la reducción del tráfico intermitente mediante la comunicación de información sobre las señales de tráfico a los conductores reduce el consumo de combustible y, por tanto, las emisiones. Métodos más avanzados, que implican la conectividad de los vehículos y el procesamiento de datos basado en la IA, pueden reducir aún más las emisiones causadas por la congestión y el tráfico ineficiente.” Impacto limitado de la gestión tradicional del tráfico. Las autoridades de muchos países llevan décadas implantando sistemas de transporte inteligentes, desde soluciones de señalización hasta sistemas de tarificación de la congestión. Sin embargo, los enfoques tradicionales tienden a centrarse en soluciones independientes y aisladas que utilizan sólo un pequeño subconjunto de los datos de tráfico disponibles en la actualidad. Por lo tanto, los enfoques tradicionales sólo pueden proporcionar beneficios limitados en cuanto a emisiones y calidad del aire. Nueva gestión del tráfico en Buenos Aires, Argentina. La Ciudad de Buenos Aires desarrolló un plan estratégico en 2017, pasando de una gestión del tráfico reactiva a otra proactiva y colaborativa. El nuevo Sistema de Gestión Integral de la Movilidad (SGIM) permite a la ciudad gestionar datos de múltiples fuentes para generar y difundir información de alta calidad. El software que se desplegó para el SGIM en con la plataforma EcoTrafiX™ de Kapsch funciona como una plataforma paraguas que puede interconectarse y sentarse encima de la estructura actual para una gestión más unificada – incluyendo información de Google Maps y Waze, operadores de peaje y otros sistemas de terceros. En la actualidad, Buenos Aires opera con una supervisión global de la movilidad de la ciudad: supervisa los eventos e incidentes y permite a la gente utilizar un sistema de transporte multimodal con una gestión eficiente de la congestión que está orquestada por un centro de control integrado de última generación.

Madrid, 12 de abril de 2021 – La tecnología de vehículo conectado de Kapsch TrafficCom, proveedor internacional de tecnología, servicios y soluciones para Sistemas de Transporte Inteligente (ITS), está presente en el proyecto AUTOMOST, puesto en marcha recientemente en la ciudad de Málaga. Este proyecto de  I+D, financiado por la UE y desarrollado por el gestor de flotas de autobuses, AVANZA, junto con el Ayuntamiento de Málaga y el Puerto de Málaga, tiene como objetivo avanzar en la automatización del transporte colectivo. Los reguladores semafóricos inteligentes de Kapsch transmiten directamente la información SPaT (Signal Phase and Timing, por sus siglas en inglés) – mensaje con fases de señal y tiempo para cada uno de los carriles que acceden al cruce- de los semáforos al vehículo autónomo. El consistorio malagueño, que siempre ha apostado por convertir a Málaga en una ciudad tecnológica, innovadora e inteligente, ha elegido la zona del Puerto como banco de pruebas para desarrollar este proyecto de vehículo autónomo y analizar los beneficios de la automatización del transporte público de forma más controlable, al tratarse de una línea de autobús de menor complejidad. A finales de 2020, Kapsch resultó adjudicataria por parte del Ayuntamiento de Málaga para el suministro de 11 reguladores semafóricos EcoTrafiX™ con sus correspondientes RSU (Road Side Unit), que se se conectan, ahora, a la plataforma tecnológica sobre la que se ha desarrollado el proyecto AUTOMOST, para proporcionar información en tiempo real entre los autobuses y la infraestructura en las intersecciones con semáforos de la ciudad de Málaga. Estos vienen a sustituir a los controladores disponibles originalmente, que se habían quedado obsoletos para soportar las características de SPaT. La información SPaT proporcionada por la tecnología de Kapsch incluirá el estado actual de los grupos semafóricos y el tiempo restante hasta el próximo cambio. Esto permitirá, a los autobuses  y cualquier otro vehículo, conocer de antemano los tiempos exactos de rojo, verde o ámbar en la intersección para poder gestionar la conducción autónoma y adecuar sus velocidades a las citadas fases. Se trata de una innovadora iniciativa, ya que es la primera vez que se instala en España un sistema de tráfico de estas características, capaz de emitir una frecuencia en protocolo G5 y 5G al mismo tiempo, y enviar a todos los vehículos cercanos un código con información sobre las fases de señal y tiempo de los semáforos. “Estamos encantados de poder contribuir a la puesta en marcha de este innovador proyecto, que reafirma nuestro compromiso con la movilidad urbana inteligente”, señala Javier Aguirrre, CEO y Presidente de Kapsch para España y Portugal. “Las tecnologías de vehículos conectados (V2X) y de conducción autónoma abren grandes oportunidades. Málaga, referente español en Smart Cities, utiliza desde hace años las soluciones de Kapsch para controlar y gestionar de forma integrada el tráfico de la ciudad. Ahora, mediante esta iniciatia, se convierte de nuevo en pionera a la hora de aplicar la tecnología para mejorar la vida de sus ciudadanos”. El regulador de tráfico EcoTrafiX™  Controller permite una movilidad eficiente, segura, y sostenible al establecer prioridades de paso de transporte público, vehículos de emergencia, bicicletas o peatones, en función de las necesidades particulares de cada proyecto. EcoTrafiX™ tiene capacidad para funcionar con distintos protocolos (UNE, NTCIP, UTMC) y se adapta a cualquier tipo de operación, tanto en modo aislado, bajo control centralizado, como con sistemas de control de tráfico adaptativo. Por su parte, la RSU (Road Side Unit) RIS-9160 de Kapsch proporciona un rápido intercambio de datos entre el vehículo y la infraestructura.

La tecnología de la multinacional, basada en sistemas de Inteligencia Artificial, permitirá controlar y predecir el flujo de vehículos y peatones.

El importe de los contratos asciende a más de 3,6 millones de euros.

Las soluciones de Kapsch permitirán la detección automática de incidentes y su gestión de manera efectiva.

Tochterunternehmen tolltickets stellt Services für neue Marktplatz-Funktion von Ford bereit.

The first MLFF (Multi-Lane Free Flow) toll system to operate in Ecuador has just been installed.

Santiago de Chile, 5 de noviembre, 2020 – El 89% de los conductores chilenos estaría dispuesto a no utilizar su vehículo privado a determinadas horas para mejorar la calidad del aire en la ciudad. Como alternativa de transporte, están a favor de iniciativas como los carriles VAO (para autos con más de un ocupante) (84%), el uso de vehículos eléctricos (96%), o de bicicletas (90%). Son los datos confirmados por el “Índice Kapsch TrafficCom 2020”, una encuesta realizada en marzo de este año en 9 países. A pesar de que un consenso amplio ya existía en la población, la práctica durante la crisis del COVID-19 no corresponde a las expectativas: el número de pasajeros en el transporte público ha caído drásticamente y los vehículos eléctricos aún no llegaron a este mercado. Por otro lado, se nota un aumento explosivo del uso de bicicletas. Expertos en movilidad recomiendan aprovechar este momento para alcanzar objetivos de gestión de tráfico y calidad del aire con acciones específicas. “Las secretarías de movilidad de las grandes ciudades en todo el mundo tuvieron que reaccionar rápido durante la pandemia para crear más espacio para peatones y ciclistas”, dice Carlos Wiedmaier Vicepresidente de Solution Consulting de Kapsch TrafficCom para América Latina. “Para mantener el distanciamiento social, las ciclovías existentes han sido expandidas, y nuevas ciclovías han sido creadas. Sin embargo, será solo una cuestión de tiempo para que el número de autos en las calles aumente de nuevo. Por miedo al contagio, aunque se levanten las restricciones, la mayoría de las personas seguirán evitando el transporte público siempre que puedan.” Los gestores de las ciudades deberían aprovechar la oportunidad que existe ahora para implementar sistemas que posibilitan generar una movilidad sostenible en el largo plazo. En este contexto, existen soluciones que, de forma rápida y efectiva, ayudan a gestionar el tráfico para reducir la congestión y las emisiones relacionadas con este: desde la gestión de accesos hasta las tecnologías electrónicas de cobro de peajes y de libre circulación o la gestión inteligente del tráfico, con sistemas semafóricos capaces de adaptarse al tráfico en tiempo real y reducir los niveles de congestión. Para Carlos Wiedmaier, “la crisis del coronavirus ha hecho visible los efectos negativos del transporte en la contaminación. Las mejoras de la calidad del aire llegaron durante el confinamiento, sin embargo, con la disminución de las restricciones, estas se están disipando. La pandemia nos ha abierto la oportunidad de reconsiderar las estrategias de movilidad. Es necesario una gestión holística para lograr sistemas de transporte más eficientes, resilientes y sostenibles”. Sistema de Gestión Integral de la Movilidad en Buenos Aires. En Buenos Aires ya se están dando pasos en este sentido, mediante el análisis de la movilidad real para mejorar y agilizar el tráfico urbano. El Sistema de Gestión Integral de la Movilidad (SGIM) desarrollado por Kapsch, está basado en la obtención y tratamiento de datos en tiempo real, a través del estudio de la demanda de los distintos modos de movilidad que hay en la ciudad -vehículos, bicicletas y transporte público. La solución EcoTrafiX™ de Kapsch, implantada para el SGIM de Buenos Aires, analiza la información que proviene de múltiples fuentes de datos, desde estaciones de conteo de vehículos tradicionales a otras más avanzadas, basadas en analítica de imágenes en tiempo real, con cámaras y sofisticados algoritmos de cálculo para el conteo, junto con campañas específicas, informaciones de gestores de flotas, información de la policía de la ciudad, etc. Con la fusión de todos estos datos, se obtiene información útil para el análisis comparativo en tiempo real del comportamiento de la movilidad y su planificación futura, lo que permite detectar anomalías e incidencias. En palabras de Carlos Wiedmaier, “gracias a este proyecto la ciudad puede hacer una mejor planificación para desarrollar la movilidad multimodal, priorizando el transporte público, al tiempo que favorece su apuesta por la accesibilidad, la mejora de la seguridad peatonal y el desarrollo e impulso de la bicicleta. Como consecuencia, Buenos Aires está más preparada para poner en práctica soluciones para reducir la congestión y con ello mejorar el cuidado del medio ambiente, reduciendo la contaminación”.  

Buenos Aires, 5 de noviembre, 2020 – El 81% de los conductores argentinos estaría dispuesto a no utilizar su vehículo privado a determinadas horas para mejorar la calidad del aire en la ciudad. Como alternativa de transporte, están a favor de iniciativas como los carriles VAO (para autos con más de un ocupante) (80%), el uso de vehículos eléctricos (92%), o de bicicletas (85%). Son los datos confirmados por el “Índice Kapsch TrafficCom 2020”, una encuesta realizada en marzo de este año en 9 países. A pesar de que un consenso amplio ya existía en la población, la práctica durante la crisis del COVID-19 no corresponde a las expectativas: el número de pasajeros en el transporte público ha caído drásticamente y los vehículos eléctricos aún no llegaron a este mercado. Por otro lado, se nota un aumento explosivo del uso de bicicletas. Expertos en movilidad recomiendan aprovechar este momento para alcanzar objetivos de gestión de tráfico y calidad del aire con acciones específicas. “Las secretarías de movilidad de las grandes ciudades en todo el mundo tuvieron que reaccionar rápido durante la pandemia para crear más espacio para peatones y ciclistas”, dice Carlos Wiedmaier Vicepresidente de Solution Consulting de Kapsch TrafficCom para América Latina. “Para mantener el distanciamiento social, las ciclovías existentes han sido expandidas, y nuevas ciclovías han sido creadas. Sin embargo, será solo una cuestión de tiempo para que el número de autos en las calles aumente de nuevo. Por miedo al contagio, aunque se levanten las restricciones, la mayoría de las personas seguirán evitando el transporte público siempre que puedan.” Los gestores de las ciudades deberían aprovechar la oportunidad que existe ahora para implementar sistemas que posibilitan generar una movilidad sostenible en el largo plazo. En este contexto, existen soluciones que, de forma rápida y efectiva, ayudan a gestionar el tráfico para reducir la congestión y las emisiones relacionadas con este: desde la gestión de accesos hasta las tecnologías electrónicas de cobro de peajes y de libre circulación o la gestión inteligente del tráfico, con sistemas semafóricos capaces de adaptarse al tráfico en tiempo real y reducir los niveles de congestión. Para Carlos Wiedmaier, “la crisis del coronavirus ha hecho visible los efectos negativos del transporte en la contaminación. Las mejoras de la calidad del aire llegaron durante el confinamiento, sin embargo, con la disminución de las restricciones, estas se están disipando. La pandemia nos ha abierto la oportunidad de reconsiderar las estrategias de movilidad. Es necesario una gestión holística para lograr sistemas de transporte más eficientes, resilientes y sostenibles”. Sistema de Gestión Integral de la Movilidad en Buenos Aires. En Buenos Aires ya se están dando pasos en este sentido, mediante el análisis de la movilidad real para mejorar y agilizar el tráfico urbano. El Sistema de Gestión Integral de la Movilidad (SGIM) desarrollado por Kapsch, está basado en la obtención y tratamiento de datos en tiempo real, a través del estudio de la demanda de los distintos modos de movilidad que hay en la ciudad -vehículos, bicicletas y transporte público. La solución EcoTrafiX™ de Kapsch, implantada para el SGIM de Buenos Aires, analiza la información que proviene de múltiples fuentes de datos, desde estaciones de conteo de vehículos tradicionales a otras más avanzadas, basadas en analítica de imágenes en tiempo real, con cámaras y sofisticados algoritmos de cálculo para el conteo, junto con campañas específicas, informaciones de gestores de flotas, información de la policía de la ciudad, etc. Con la fusión de todos estos datos, se obtiene información útil para el análisis comparativo en tiempo real del comportamiento de la movilidad y su planificación futura, lo que permite detectar anomalías e incidencias. En palabras de Carlos Wiedmaier, “gracias a este proyecto la ciudad puede hacer una mejor planificación para desarrollar la movilidad multimodal, priorizando el transporte público, al tiempo que favorece su apuesta por la accesibilidad, la mejora de la seguridad peatonal y el desarrollo e impulso de la bicicleta. Como consecuencia, Buenos Aires está más preparada para poner en práctica soluciones para reducir la congestión y con ello mejorar el cuidado del medio ambiente, reduciendo la contaminación”.